En el arrendamiento de viviendas, es fundamental que ambas partes cumplan con sus obligaciones establecidas en el contrato. Sin embargo, en ocasiones pueden surgir situaciones en las que una de las partes no cumple con lo acordado, lo que puede llevar a la resolución del contrato. A continuación, se detallan los procedimientos y las opciones legales en caso de incumplimientos:

Procedimiento de desahucio por falta de pago

Uno de los incumplimientos más comunes por parte del arrendatario es el impago de la renta acordada. Ante esta situación, el arrendador tiene la opción de iniciar un procedimiento de desahucio para recuperar la vivienda y reclamar las cantidades adeudadas. Este proceso requiere una notificación formal al arrendatario y debe seguir el procedimiento establecido por la ley.

Otras causas de resolución del contrato de arrendamiento

Además del impago de la renta, existen otras situaciones en las que se puede dar por resuelto el contrato de arrendamiento. Estas pueden incluir el incumplimiento de otras obligaciones contractuales por parte del arrendatario, como el uso indebido de la vivienda, subarrendar sin autorización o no mantener la vivienda en buen estado. En estos casos, el arrendador también debe seguir un procedimiento legal adecuado para la resolución del contrato.

Reclamaciones y demandas en casos de incumplimiento

En caso de incumplimiento por parte del arrendador, el arrendatario tiene el derecho de presentar reclamaciones y, si es necesario, interponer demandas legales para hacer valer sus derechos.